Cómo poner una inyección intramuscular en el glúteo
Aplicar una inyección intramuscular en el glúteo puede parecer intimidante si nunca lo has hecho, ¿verdad? Pero tranquilo, con la técnica adecuada y un poco de práctica, se convierte en un procedimiento bastante sencillo.
En este artículo te voy a explicar, paso a paso, cómo aplicar una inyección intramuscular en el glúteo de forma segura, cómoda y sin sustos. Ya sea que estés estudiando enfermería o necesites aplicar una en casa bajo indicaciones médicas, esta guía te será útil.
¿Qué materiales necesitas?
Antes de comenzar, asegúrate de tener todo lo necesario a la mano. No querrás estar buscando cosas con la jeringa ya cargada.
Materiales:
- Jeringa (según la dosis del medicamento)
- Aguja intramuscular (de preferencia 21G x 1 ½”)
- Medicamento recetado
- Algodón o gasas estériles
- Alcohol etílico
- Guantes (opcional, pero recomendado)
Tener el ambiente limpio y tranquilo también es importante. Y sí, si eres el paciente, respira hondo, esto va rápido.
Preparación del área y del paciente
Lo primero es decidir dónde vas a realizar la aplicación. La inyección intramuscular en el glúteo puede hacerse con el paciente acostado boca abajo o de pie, con el peso sobre la pierna contraria al glúteo que se va a inyectar.
Una vez tengas la postura lista:
- Desinfecta bien el área con alcohol.
- Asegúrate de tener buena iluminación.
- Verifica la dosis y la fecha de vencimiento del medicamento.
¿Dónde aplicar exactamente?
Aquí viene una de las dudas más comunes: ¿en qué parte del glúteo se pone la inyección?
Divide el glúteo imaginariamente en cuatro cuadrantes. De esos, vamos a usar el cuadrante superior externo. Es decir, la parte más arriba y hacia fuera del glúteo.
¿Por qué ese cuadrante? Porque allí se evita tocar el nervio ciático, uno de los errores más temidos cuando se trata de una inyección intramuscular glúteo mal puesta.
Técnica para aplicar la inyección intramuscular en el glúteo
La técnica no tiene por qué ser complicada. Aquí te lo dejo paso a paso:
1. Carga la jeringa
Extrae el medicamento con cuidado, eliminando las burbujas de aire. Si el medicamento es viscoso, puedes usar una aguja para cargar y otra para aplicar.
2. Toma la jeringa como un lápiz
Sí, como si fueras a escribir. Esta es una forma que permite tener mayor control.
3. Introduce la aguja a 90°
Con decisión pero sin violencia. La clave está en no dudar, hacerlo de un solo movimiento firme.
4. Inyecta el medicamento lentamente
Hazlo sin apuro. Si es penicilina o sustancias oleosas, la aplicación debe ser aún más lenta para evitar molestias.
5. No es necesario aspirar
En algunos casos se aspiraba para evitar vasos sanguíneos, pero hoy en día se sabe que solo se aspira si el medicamento lo requiere, como con algunos antibióticos específicos.
6. El truco final: estira la piel al retirar
Justo al sacar la aguja, estira suavemente la piel del paciente. Este movimiento ayuda a que el orificio se cierre de inmediato y evita sangrado o que el medicamento se derrame.
Así de simple. El paciente solo sentirá el pinchazo inicial y el paso del medicamento, pero la retirada puede pasar desapercibida si lo haces con esta técnica.
¿Y si la inyección se pone mal?
Ah, la temida inyección intramuscular glúteo mal puesta. Sucede más de lo que debería, sobre todo por falta de técnica.
Algunas consecuencias pueden ser:
- Dolor persistente
- Formación de abscesos
- Inflamación
- Lesión del nervio ciático
Por eso, insistimos: sigue la técnica de inyección intramuscular glúteo al pie de la letra. No improvises. Y si tienes dudas, consulta con un profesional.
Consejos prácticos para una mejor experiencia
- Relaja el músculo del paciente. Un músculo tenso duele más al inyectar.
- Usa una aguja nueva para cada inyección. Nada de reutilizar.
- Si el medicamento arde, puedes calentar ligeramente la ampolla entre tus manos antes de aplicarlo.
¿Cuándo evitar esta vía?
Aunque es una vía común y efectiva, no siempre es la indicada. No se recomienda si:
- El paciente tiene lesiones en el área
- Hay atrofia muscular severa
- El medicamento es irritante y puede dañar el tejido
En estos casos, puede considerarse una vía alternativa, como la subcutánea o intravenosa. Si quieres conocer más sobre tipos de enfermería y roles clínicos, puedes leer sobre las funciones de una enfermera instrumentista o cómo se aplican protocolos específicos en quirófano.
Resumen de pasos: aplicar inyección intramuscular glúteo
| Paso | Descripción breve |
|---|---|
| 1. Preparación | Reúne material, desinfecta y ubica el sitio |
| 2. Cargar la jeringa | Sin aire y con precaución |
| 3. Introducción de la aguja | A 90° y sin dudar |
| 4. Inyección del fármaco | De forma lenta y controlada |
| 5. Retiro con estiramiento | Estirar piel al retirar minimiza sangrado y dolor |
| 6. Desecho del material | Deposita en contenedor para material punzocortante |
¿Y si aún me siento inseguro?
Si te cuesta ganar confianza, puedes practicar con almohadas o simuladores anatómicos. También puedes reforzar tus conocimientos revisando esta guía práctica sobre el código deontológico de enfermería para comprender la importancia de actuar con ética en este tipo de procedimientos.
Y recuerda: la práctica hace al maestro, pero la preparación previa hace que la práctica sea segura.
Con esta guía, ya sabes cómo aplicar una inyección intramuscular en glúteo con seguridad, técnica y confianza. ¿Te animas a intentarlo con supervisión? La próxima vez que escuches “inyección en el glúteo”, sabrás exactamente qué hacer.